INTRUSOS
La vida evoluciona para cada uno de nosotros. Aveces lentamente, casi sin darnos cuenta, un día te despiertas y al echar la vista atrás y comparar el pasado con tu momento presente, te das cuenta de ello. A veces rápidamente, de una forma tan veloz que no te da tiempo a asimiliar los cambios. Los acontecimientos se concatenan, se yuxtaponen, hasta tal punto que pueden hacerte bailar con los ojos vendados hacia la ansiedad y la extenuación.
El sábado por la noche fui consciente de uno de esos momentos de cambio. La vida nos está pasando por encima muy deprisa. Isa y yo estamos al borde del abismo de los 30. Una nueva etapa, un nuevo camino. Como diría mi amiga Reina, cada vez estamos más cerca de ese momento en que la vida se va quedando a nuestras espaldas.
Para mi 29 cumpleaños quise hacer una fiesta a lo grande. Llené mi pequeño apartamento de la calle Gobernador de una multitud de personas, de amigos de aquí y allá, compañeros de trabajo, conocidos de conocidos, ex y amante, incluidos. Fue una noche cargada de todo tipo de emociones. No sólo celebraba que era un año mayor, celebraba que por fin había cambiado mi vida y que había sido capaz de tomar sus riendas para guiarla por los paisajes que yo quería.
De ese momento hasta ahora ha pasado un año, hasta la noche del sábado no fui consciente de ello del todo. José Alfredo, 23:20. Llegué corriendo y sudando, qué calor hacía en Madrid. Al entrar tuve la primera sorpresa y el primer golpe de visión de los avatares que se han sucedido en todo este tiempo. Allí estaban Isa, Eli, al que hacía meses que no veía, y una chica morena de pelo largo y aire hippie que tenía aproximadamente mi edad. Di por hecho que se trataba de Noelia, la novia de mi amigo, de la que había oído hablar mucho pero a la que no tenía el gusto de conocer. Como siempre hago en estas ocasiones en las que una presencia extraña me pone algo nervioso, me presenté yo mismo y me puse a hablar como los locos sin dar tregua a mis acompañantes. Noelia debió pensar cualquier cosa de mi. Al rato llegaron Toni, el novio de Isa, y su amigo Lorenzo, muy atractivo por cierto. Y poco después se abrieron los focos y se desplegó la alfombra roja para recibir a Esther y a Montse. En ese momento me percaté de que nuestra pequeña pandilla se estaba abriendo y dando cabida a nuevos intrusos.
Intruso es todo aquel que en forma de goteo se va introduciendo en un grupo ya establecido, que tiene sus normas y sus roles. Con la entrada del intruso el grupo está obligado a cambiar sus formas para que éste con el tiempo deje de serlo y se convierta en un miembro de pleno derecho.
Estamos en un momento de entrada de intrusos. No sé si se quedarán todos, si alguno no llegará a introducirse del todo, ni siquiera sé si alguno de los antiguos miembros de nuestro club acabarán por dejarlo. Lo que sí sé es que gracias a dios, todos son aceptados y bienvenidos, que los cambios que se puedan producir están dejando de asustarme, que parece que año tras año las cosas cambian para mejor y que el domingo seré un año más viejo y más sabio.
10 Comments:
Bueno yo estaré virtualmente para felicitarte, los cambios son siempre buenos, aunque no lo parezca.
Ya te echaba de menos...
FELICIDADESSS!!!!!!
Pásalo muy bien con nuestro valenciano, y cuidanoslo(y q te cuide,diselo), que x aki le examos ya de mens. Volved pronto!!!
MªJosé
Y yo cómo hago pa felicitarte? te mando un zetabeso por Seur?
Buenas llevo unos dias leyendote, desde que te descubri en madrid oasis y es el momento de intervenir y decir.... en mi pandilla las intrusos/as hicieron extragos pero es ley de vida.
Un saludo
no hay que tener miedo a los intrusos. nunca.
por cierto, felacid...digo, felicidades!
Para mi suerte tengo un don que no debería revelar y es el de procurar el odio de los demás hacia la gente que me disgusta, asi que mi grupo de amigos siempre es cuidadosamente seleccionado.
Si alguno te escama, vuelvelos en su contra.
A veces hace falta algun que otro intruso para renovar los aires del grupete de amigos. Otras, si es cierto, que los intrusos acaban jodiendo el ambiente.. Asi que tampoco me opongo a analizar a los intrusos, sin llegar a hacerle un tercer grado.
Pd:Pues yo tambien tenia pensado mandarte algo desde yankilandia pero no tengo tu dire.. asi que.. te lo mandare virtual :).
Nosotros hemos sido intrusos alguna vez en nuestra vida. Yo, por ej, cuando entré en el círculo de mi chico..., me gustó que me trataran bien, por eso yo intento tratar bien a los intrusos.
En fin..., oye, que felicidades, marica mala ;)
Un beso.
Como me conozco, y sé que se me va a olvidar felicitarte... aprovecho ahora: FELICIDADES!!!!!
Yo tengo mu mala memoria, así que por si el domingo se me olvida venir a cantarte, lo hago ahora.
Feliz Cumpleaños, chiquillo.
Publicar un comentario
<< Home