08 octubre 2006

ENVIDIA Y AUSENCIA

Una imagen de una noche feliz a mitad del verano. En ella sonrío rodeado de compañeros de trabajo en momentos prealcohólicos. Lo pasé bien, me rei, bailé, bebí, charlé... y me mentí a mi mismo como otras tantas miles de veces. Llegué a casa a las 9 de la mañana y me acosté. Al despertar tenía un dolor de cabeza insoportable y dolor de pie que a día de hoy aún me dura, fruto de un resbalón inapropiado.
Aprovecho el momento como nadie, me introduzco en grupos y creo ser uno más, me divierto hasta el amanecer pero al día siguiente cuando me despierto me siento solo, muy solo. Madrid se me empieza a quedar grande, como casi todo lo que me rodea en este momento de mi vida. Me siento muy perdido y muy pequeño y me empeño en superarlo todo solo porque siempre lo hice así. Pero cada vez me encuentro más cansado y con menos alicientes que me animen a remontar el vuelo. Y echo en falta ese grupo de personas entre las que me sienta feliz.
Hace unos días me vi sin comerlo ni beberlo en medio de una pandilla de amigos gays de mi edad. En ella sólo conocía a uno de sus miembros. Los observaba con envidia sana. Como soy inmensamente prejuicioso, es algo contra lo que lucho pero que me cuesta erradicar, nunca tuve amigos gays, siempre huí de esa posibilidad y aún no tengo muy claro por qué. Desde mi silla los observaba interaccionando, cada uno en su estilo, todos muy diferentes pero con un lazo común que destilaba calidez y afecto más allá de lo sexual. Los envidié profundamente, quise ser uno más de ellos, me reí, me emborraché, me divertí y al día siguiente, como siempre, me desperté con resaca y con la sensación de soledad que es cada vez más habitual.
La culpa de esto, de que en 12 años que llevo viviendo en Madrid no haya sido capaz de establecer unos nexos de unión lo suficientemente fuertes para que perduren a día de hoy, la tengo yo. Mi carácter fuerte, mi forma extramadamente radical de decir lo que pienso, sin tacto, esa tendencia a convertir opiniones en sentencias, el no respetar que el otro se autoengañe a sí mismo y golpearle con la verdad en la cara, mi miedo a las relaciones de amistad con hombres, basado en una supuesta vanidad que me hace dar por hecho que todos se van a querer acostar conmigo y mi sentimiento de inferioridad, que me lleva a depender en exceso de aquellos que tengo a mi alrededor.Todo esto hace que me acabe volviendo un ser cansino y prescindible en la vida de los demás. Con el paso del tiempo sólo perduran aquellas personas que están lejos, que no tienen que soportarme en el día a día. Todos huyen y yo me sigo quedando solo. Mi teléfono cada vez suena menos, recuerdo cuando tenía 14 años, como tenía que llamar todos los días a una chica para que me incluyera en los planes con sus amigos. Ahora me siento de nuevo así, mendigando compañía, una compañía que se convierte en calabaza al día siguiente y yo me convierto en una sombra al despertar, por el esfuerzo que realicé en la noche para ser esplendoroso y querido, lo suficiente para que el teléfono suene en algún momento del día. Y el teléfono sigue sin sonar.

19 Comments:

Blogger Shiba said...

¿Otra vez fustigándote, La Llamada...?

Por lo que cuentas entiendo un poco lo que puedes sentir, ese prejuicio o los problemas que el propio carácter sincero puede tener contra los lazos de la amistad.

Creo que el hecho de que hables de ello es un buen paso. Pero tal vez te has encasillado a tí mismo con esos rasgos que pueden disgustarte. Las dificultades nos las ponemos nosotros mismos, creo yo... seguro que pronto sonará el teléfono...

Besos y anímate.

16:55  
Anonymous Anónimo said...

Pues adelante, dame tu móvil y yo te llamo jajaja pa que no te sientas así.

Yo también me siento asi.... pero lo mío creo que ha sido por decisión propia... me he aislado, pero conscientemente....

Y como dice lucinda.... el primer paso es reconocerlo :P (Así como los alcohólicos!)

17:30  
Blogger Para, creo que voy a vomitar said...

Vaya, toda una sesión de autoterapia, la tuya.

Sabes cómo eres y por qué reaccionas o actúas de la forma que lo haces. Si te sientes mal por ello, ¿por qué no haces algo al respecto? No sabría decirte qué, pero creo que tu los sabes perfectamente.

Sabes qué?, al venir de este verano me he sentido así, justo como tu describes. Si no llamo yo no espero recibir ninguna llamada y creo que es culpa mía por autoaislarme de los demás. Se pasa mal y se siente uno muy solo, es una de las razones por las que he decidido irme de mi ciudad. No para volver a repetir patrones o huir, son otro tipo de cuestiones, pero espero no volver a cometer los mismos errores.

20:30  
Anonymous Anónimo said...

Te llamaría ahora mismo, pero dada la hora igual te molesta un poquitín. Pero tranquilo, no voy a hacerlo aunque me gustaría (si tuviera tu número, claro)
Un abrazo que suena a ring.... ring...

01:38  
Blogger Rocío said...

Estoy de acuerdo con Para, creo que voy a vomitar, deberías intentar moldear esos rasgos con los que no te sientes bien. es difícil, si por supuesto.
A mi me ocurre a menudo, el sentir la soledad, y me molesta mucho pensar que soy yo siempre el que tiene que llamar. Pero reconozco que muchas veces al culpa es mía, por no contestar a las llamadas, ni a los emails... en mi caso el problema es que soy un ser socialmente antisocial. NEcesito de la gente, pero a la vez del aislamiento, y soy un poco misántropo.
Ánimos, y aunque no sirva de mucho: los que te comentamos, al final es como si te llamasemos.

08:03  
Blogger Mar said...

Huyyy qué bajón... y encima se me pasó contestarte ayer, no se qué fue lo que me despistó.
Yo soy de un carácter más sencillo y ¿encantador? y también paso por estas crisis. De todas formas si tienes que cambiar algo ¡hazlo! y sino coge tú el teléfono que tienes suficientes amigos y amigas para ello.
Venga... ánimo, que de vez en cuando tiene que llover para que salga el sol.
Besos :)

08:28  
Blogger marga said...

Estas vacaciones están siendo perjudiciales, demasiadas horas libres para comerte el tarro...
Un poco chulito sí que eres, no lo voy a negar, pero tienes muchas virtudes también. Así que déjate de lamentos y vente a tomar cañas-minis el sábado con todo el grupito. No es una sugerencia. Es una orden.

09:20  
Blogger Juan Muriel said...

LUCINDA, lo de fustigarme es algo que me acompaña cada cierto tiempo, tengo un inevitable sentido de culpabilidad por los males ajenos, como si yo fuera el causante. Para mi la sinceridad es un rasgo imprescindible en cualquier amistad que se precie, normalmente el problema viene cuando tu amigo se quiere autoengañar porque en esos caso no se como actuar.

GUS! yo tambien me aislo, mi independencia me encanta, el problema viene cuando los demas no son conscientes de que por mucho que te guste ser independiente a veces necesitas determinadas atenciones que solo se ofrecen a los que son manifiestamente dependientes.

ARCADAS, no es un aspecto determinado lo que me hace estar así. no sé donde está la linea entre la identidad de la persona y las buenas relaciones sociales, no se moverme sin sentir que he vulnerado una de esas dos partes. por otro lado, tambien hay mucho de perdida de horizontes, de perdida de alicientes.
me gusta mi caracter y me gusta mi forma de ser, el problema es que no se como hacer muchas veces para que los demas lo entiendan sin sentirlo como una agresion.

ENIS DEL MAR, no es que ahora pretenda que tras leer el post todo el mundo me llame. es algo que va más allá.

BLUE, yo no soy antisocial lo que pasa es que me cuesta que los demas comprendan mis codigos y eso hace que a veces me aisle socialmente porque me cuesta menos trabajo, tambien soy relativamente misantropo.

THALATTA, lleva lloviendo casi un año ya y no soy capaz de pegar el tiron hacia arriba que ya pegue en otras etapas de crisis tiempos atras. cada vez me canso más de hacerme comprender, es muy pesado y eso hace que recurras al aislamiento. aunque mi caracter que en el fondo es aperturista hace todo lo que puede por abrirse a nuevas gentes con la esperanza de ser aceptado, es algo por lo que llevo luchando desde siempre y es dificil.

PERLIMPINA, no es exactamente chuleria, es algo mas parecido a la prepotencia. esto no es el resultado de unas vacaciones comiendome la cabeza, viene desde nociembre del año pasado.
no podre ir a las cañas del sabado, estoy en cordoba pero espero noperderme la proxima.

10:04  
Blogger Darkblue7 said...

Yo soy hombre y te aseguro que no quiero acostarme contigo...
Se puede tener amigos gays, amigas lesbianas y heteros... pero es que tener amigos no es tan fácil... ese es el problema
Un abrazo

11:25  
Blogger isabel said...

Me parece tan fuerte y me siento tan ofendida que ahora mismo no puedo ni contestar.
La línea telefónica es bidireccional,....No sé si sabes exactamente que lo que has escrito me duele, y mucho, .... ahora podría decirte miles de cosas par consolarte en plan no estas solo, etc, etc. Pero creía que lo sabías, por lo visto no, y eso me ofende, aunque quizá te dé igual...
Sinceramente estoy Flipando ....
me gustaría que me sacaras de esta duda ..... quizá estés demasiado encerrado en ti mismo ahora.
Y lo peor es que sé que no me contestarás a este post...

12:08  
Anonymous Anónimo said...

Entendí que era algo que iba mas allá. Lo entendí perfectamente. Por eso mas que llamarte preferia enviarte un abrazo con sonido a timbre telefónico, precisamente porque entendía que era algo que iba mas allá.
Descuelga si te apetece.

15:31  
Blogger Juan Muriel said...

DARKBLUE7, uy, que alivio, no sabes lo que es esa presion. es cierto tener amigos no es tan facil y ademas estoy empezando a comprobar que si se puede ser amigo de un hombre.

ISABEL, no es algo personal y no te ofendas si crees que no tienes motivos.

ENIS DEL MAR, gracias por el abrazo.

18:08  
Anonymous Anónimo said...

Ánimo. Te he leído en varias ocasiones, pero hoy te mereces que te deje mi huella por aquí. No crees que tus amigos te abandones por tu carácter. Si eso pasa, es porque en realidad no son lo buenos y reales. A veces es necesario encontrarse con gente que te digan lo que piensa cara a cara y sin pelos en la lengua.
Silvia.

20:51  
Blogger Juan Muriel said...

SILVIA, puede que tengas razon pero eso te hace pagar peaje.

20:59  
Anonymous Anónimo said...

Eres en efecto prepotente, soberbio y esa actitud tuya de sobrado es el resultado de ello.
Aquellos barros te traen estos lodos. Si tu conclusión es que eres asi, o te planteas ponerle remedio o esto que te esta pasando, no se te quede en un simple aviso de lo qeu puede ser el resto de tu vida. Tu mismo, tio.

23:44  
Blogger jaimito said...

No creo que seas cansino, ni prescindible... directo sí, y quizás con poco tacto jajaja...
Yo me reí mucho y me sentí fatal cuando el teléfono me hizo dejarte en mitad de extraños... pero siempre sabes sacar provecho y observar a los demás hace que aprendamos mucho...
quítate esos rollos de la amistad con otros gays, son personas como tu, no son una secta. Además, ya viste que no teníamos, en apariencia, nada de homogeneidad ¿no?
sigo por aquí y tu sigues de vacaciones.. ¿una caña?
bsss

02:37  
Blogger Juan Muriel said...

GAY LEON, me has calado a la perfección.

JAIMITO, me encantaria lo de la caña pero estoy en cordoba en estos dias de vacaciones. no debes sentirte mal por haberme dejado solo, me sirvio para observar muchas cosas que me gusto mucho observar... ah, gracias por intentar que me sintiera uno más y tus amigos me cayeron muy bien.

10:55  
Blogger Unknown said...

me ha gustado mucho este post, me siento bastante identificado con lo que dices
Un abrazo

20:22  
Blogger Juan Muriel said...

TATÚ, me alegro de que te haya gustado y me entristece que te sientas identificado. podemos hacer un club.

00:50  

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