MI SILENCIO

Hoy es uno de esos días en los que a uno no le apetece hablar. Sólo necesita la paz de su silencio. Imaginarse frente al mar y dejarse embriagar por el sonido ambiente. Hoy es uno de esos días en los que sólo estoy YO, los demás me sobran, me escaman e, incluso, me molestan un poco. Prefiero hacer oidos sordos a sus llamadas, que han sido varias, no quiero que perturben mi serenidad.

En una persona de naturaleza ruidosa y follonera como yo es raro el silencio. Los demás me miran extrañados, no saben cómo reaccionar y se preguntan si algo me ocurre. El exceso de ruido parece que hace que se fijen menos en ti y, sin embargo, eso que a mi me está dando tanta tranquilidad a ellos les pone nerviosos. Mala suerte, porque hoy es uno de esos días en los que a uno no le apetece hablar. Sólo necesita la paz de su silencio.